Una de las cascadas
más hermosas de Colombia en muchas ocasiones por culpa del fenómeno de ‘El
Niño’, la desviación del río Bogotá y las obras de Emgesa se queda sin agua.
Los turistas quedan estupefactos al
ver el desolador panorama en el que se ha convertido una de las cascadas más
hermosas del país.
La
niebla y la magia que envolvían el Salto del Tequendama, una de las caídas de
agua emblemáticas de Colombia, que se había convertido en un famoso atractivo
turístico lleno de historias y leyendas sobre la cultura muisca, tristemente es
hoy un paraje desolador. El agua ya no cae por ese abismo rocoso de más de 150
metros de altura y al final de lo que antes era una maravillosa cascada, lo
único que queda es un pequeño pozo oscuro repleto de basura que hiede.